Desde su lanzamiento, algunos usuarios de iPhone 5S se han quejado de que los sensores internos del teléfono se encuentran mal calibrados desde que salieron de la fábrica. Recientes pruebas demuestran que al menos ciertos dispositivos de la nueva entrega del teléfono de Apple no sólo no están bien graduados, sino que están completamente fuera de los parámetros normales.
Al menos 2 páginas especializadas en tecnología corrieron varios tipos de pruebas en el teléfono y descubrieron que tanto el nivel como el giroscopio, la brújula y el acelerómetro muestran datos imprecisos al comparar estos instrumentos con sus contrapartes del mundo real o incluso, con los sensores mismos de su antecesor, el iPhone 5.
Las pruebas más detalladas las efectuó el sitio Gizmodo, el cual probó 2 de los nuevos teléfonos de Apple con la versión más reciente de iOS 7. La primera de éstas se comparó un inclinómetro con el del iPhone 5S; los resultados arrojaron que el software muestra un error de 2 a 3 grados en la inclinación verdadera, aunque algunos usuarios reportan hasta 4 o 6 grados de imprecisión. En comparación, el iPhone 5 presentó una calibración perfecta.
En las pruebas que se efectuaron al giroscopio, resultó la misma imprecisión de 3 grados; como muestra se puede ver que al manejar en el juego Real Racing 3 el auto tiende a inclinarse hacia la izquierda aún cuando el teléfono se encuentra en una superficie totalmente plana.
Como ya mencionamos, estos 2 componentes no son los únicos que presentan fallas, pues la brújula, a pesar de que ni el iPhone 5 ni el 5S fue totalmente precisa, presentó un error de hasta 10 grados al indicar la posición del norte en el nuevo teléfono de Apple. Lo anterior podría ocasionar que las aplicaciones de navegación no detecten la dirección en la que te encuentras avanzando y arrojen resultados falsos al darte indicaciones. Cabe mencionar que la app a veces dejaba de funcionar completamente y se tenía que detener y volver a iniciar para que funcionara de nuevo.
En cuanto al acelerómetro, éste lanzó datos de movimiento aun al encontrarse inmóvil en un escritorio y aunque nuevamente el iPhone 5 también lanzó datos erróneos, estos eran mucho menos graves que los que presenta el nuevo teléfono.
Existe un debate acerca de si este problema es uno de software o de hardware; pero es importante mencionar que las mediciones no tienen el mismo margen de error para todos los usuarios. Esto inclina la balanza hacia un problema físico, pues si todos los usuarios con iOS 7 presentaran el mismo rango de equivocación sería fácil culpar al sistema operativo; y si a esto le sumamos que el error no se presenta en iPhone 5 corriendo el mismo OS, las probabilidades de una falla de hardware se incrementan aun más.
Al parecer el problema es de hardware, lo que lo hace mucho más difícil de componer
Muchos usuarios han tenido la suerte de cambiar sus teléfonos, pero Apple no puede darse el lujo de reemplazar todos los teléfonos en circulación. Lo más probable es que la compañía intente arreglar esta situación con una actualización de software. Esto sería un reto, pues como ya mencionamos los errores en las mediciones no son constantes y cada teléfono necesitaría una calibración especial, aunque esta podría llevarse a cabo de manera individual por el usuario.
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