Apple reveló el pasado 28 de octubre que la adopción de iOS 8 ya sobrepasó 52%, lo que dejó a iOS 7 con 42% y a las versiones más antiguas con sólo 5% de participación.
Hace un mes, la compañía reportó que el nuevo sistema operativo móvil contaba con 46% de adopción, apenas debajo de 49% correspondiente a iOS 7. Eso quiere decir que iOS 8 continúa creciendo, aunque lo hace a un ritmo menos acelerado que su antecesor.
Las cifras de otros sitios de analíticos difieren ligeramente de las de Apple. Por ejemplo, Mixpanel mostró esta mañana que el porcentaje de adopción de iOS 8 es 54%, mientras que Fiksu indicó el lunes pasado que se encontraba en 48.5%.
Un detalle importante a considerar es que Apple no diferencia entre los dispositivos nuevos, que ya incluyen iOS 8 de fábrica, y los que tuvieron que ser actualizados por los usuarios. Debido a eso es difícil distinguir si la adopción se debe al gran número de nuevos iPhone vendidos, o si en verdad las personas se han apresurado a actualizar sus teléfonos y tablets.
Es probable que la lenta adopción de iOS 8 se deba al gran número de problemas y quejas que externaron los usuarios desde su lanzamiento. Apple intentó parchar algunos de ellos con las versiones 8.0.1 y 8.0.2, sin embargo, la mayoría de los problemas persistieron. El pasado 20 de octubre, la compañía liberó la versión 8.1 del sistema operativo, la cual se enfocó en mejorar la conectividad Bluetooth, Wi-Fi, la reproducción de videos en Safari y la rotación de la pantalla, pero las quejas de los usuarios continúan, a pesar de la corrección de la mayoría de los errores.
Cuando comience a estabilizarse el funcionamiento de iOS 8, seguramente la adopción acelerará gradualmente. Aún así, en menos de 2 meses, la mayoría de los dispositivos iOS ya cuentan con el nuevo sistema operativo, algo con lo que Android batalla cada vez más.
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