Vivimos en la era de la información y, como tal, hay que cuidarla mucho. Conforme pasan los años, las personas generamos gigas y gigas de datos valiosos y si los dejamos en nuestra computadora el menor percance puede acabar con todo. En esta guía te mostramos 5 maneras seguras de respaldar tu información para que puedas recuperarla si algo sucede.
Respaldar localmente
Lo primero que tienes que hacer es guardar regularmente toda tu información en un disco duro. El objetivo es que este disco sea tu respaldo más completo y el que puede salvarte inmediatamente si ocurre un problema con tu computadora.
Respaldar remotamente
Muy parecido al punto anterior, con la única diferencia de que el disco duro debe ser guardado en un lugar lejano. Obviamente no será tan fácil respaldar tu información regularmente, pero si lo haces, sabrás que tus datos están guardados en un lugar seguro si algo le pasa a tu respaldo local.
Respaldar y congelar
No nos referimos al sentido literal del verbo 'congelar', sino más bien a que es información que puedes dejar guardada durante años. Por ejemplo, si acabas de casarte, sería buena idea que guardes los videos en varios USB o discos. Tal vez sea más difícil acceder a la información, pero debido a que es individual y no necesitas acceder a ella constantemente, puedes crear el respaldo y dejarlo en cualquier parte.
Automatiza el proceso
Algunos programas (como Word) permiten hacer respaldos continuos automáticos, por lo que, aunque olvides hacerlo manualmente, podrás recuperar posible información perdida si algo sucede.
Respaldos versionados
También llamados copias de seguridad progresivas, este tipo de seguro guarda diferentes formas de información de manera independiente sin sobreescribirlas, aunque están cambiando. Un ejemplo excelente es el sistema de copias de seguridad de Windows, que puede restaurar el sistema a varios estados anteriores si algo le sucede. Guarda diferentes versiones de tu información para que puedas regresar fácilmente a puntos anteriores.
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