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Nadie está a salvo de las garras malignas de Internet, ni siquiera Axl Rose

Una nueva oleada de memes se aproxima

Nadie está a salvo de las garras malignas del Internet. Ni los más altos mandos de todo del mundo ni aquel pasajero que iba en el mismo vagón del metro que tú. Así de sencillo. No hay marcha atrás, tu imagen y los pasos virtuales que das ya están grabados en los anales de la red. Cada foto que subes a tus redes sociales o tus mensajes, quieras o no, pueden ser usados en tu favor o tu contra, y en el menos peor de los casos derivar en memes. Y debes tener cuidado si pretendes que una foto que te desfavorece sea borrada o usada sin tu consentimiento; hay consecuencias de las que, estamos seguros, te arrepentirás.

No se da mucho eso de la creatividad
No se da mucho eso de la creatividad

Axl Rose está dando de qué hablar y no por las presentaciones que ha ofrecido como vocalista sustituto de AC/DC, sino porque al cantante no le están gustando los Fat Axl memes, los cuales hacen mofa de su sobrepeso. De acuerdo con TorrentFreak, en la base de datos Lumen de la DMCA (Digital Millennium Copyright Act) aparecieron peticiones que fueron enviadas a Blogspot y GoogleUserContent el 31 de mayo para exigir la eliminación de los memes basados en el integrante de Guns N 'Roses.

En total, hay 6 reclamos que refieren a una misma imagen, la siguiente, que fue tomada durante un concierto realizado en el MTS Centre de Winnipeg, Canadá en 2010:

No conforme con esos datos, TorrentFreak buscó al autor la fotografía y dio con él. Su nombre es Boris Minkevich, y en efecto, constató que él fue quien la tomó. Incluso, se reveló la fuente original que propició el meme, un post de Winnipeg Free Press.

Ahora bien, todavía no se esclarece a quién le pertenecen los derechos, si a Rose, al fotógrafo o a la publicación canadiense. Por ello, cuando busques en Google sobre el meme en cuestión, siguen y seguirán apareciendo infinidad de presentaciones de él, es inevitable. Para que dejaran de aparecer en el buscador, el afectado y las personas que lo representan tendrían que hacer una labor de dimensiones épicas, en otras palabras, imposible: enviar solicitudes de remoción a todos los sitios donde se aloja la imagen indeseada (imagina la cantidad), pues Google sólo puede cubrir los dominios de su propiedad; a eso hay que agregar que Google no es la única forma de acceder a páginas de Internet...

El caso de Fat Axl meme recuerda otro que, hace unos cuantos años, fue también noticia y que ilustra de manera perfecta lo que le depara al meme de Rose: las fotografías de Beyoncé del Super Bowl XLVII. BuzzFeed publicó una galería de 33 fotos de la pareja de Jay-Z, que fueron tomadas durante el show de medio tiempo del partido de fútbol americano más esperado de aquel año. Unas horas después, la página web recibió y publicó un email de los representantes de Beyoncé, en el que pedían fueran removidas varias fotografías porque, según, eran poco favorecedoras para la imagen de la cantante.

¿Cuál fue el resultado de la petición? Pues todo, menos lo esperado: memes, memes y más memes.

El porqué de que esta clase de peticiones está destinada al fracaso se da por un fenómeno propio de Internet, llamado efecto Streisand , el cual surge cuando alguien, una empresa o institución "intenta silenciar alguna información —puede ser un vídeo, una foto, un tuit...— y consigue el efecto contrario: circula mucho más que si no hubiera recibido esa publicidad involuntaria"; a grandes rasgos es "una táctica de censura fallida", ya que, en lugar de mejorar la situación, la empeora.

En 2008, se trató de remover un video Tom Cruise relacionado con la cienciología, y por supuesto, el intentó falló
En 2008, se trató de remover un video Tom Cruise relacionado con la cienciología, y por supuesto, el intentó falló

En conclusión, no nos debe extrañar que, en un futuro cercano, una nueva camada de memes referentes al descontento de Axl Rose deambule por redes sociales y en otros rincones de la red. Es imposible tapar con un dedo el Sol, así también cortar de tajo un hilo que crece exponencialmente y nunca tiene fin. La recomendación que podríamos hacerle a Rose es que no hubiera agitado las aguas (siendo sinceros, yo no había prestado tanta atención al meme) y que aprenda a lidiar con las bromas por más perjudiciales que sean; ni modo, nos toco vivir en una época donde todos estamos expuestos y gran parte del humor reside en ellas. ¿O se te ocurre alguna solución para este tipo de casos?

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