AT&T ha completado su adquisición de Time Warner, esto días después de que un juez federal aprobara la compra, a pesar de quejas y objeciones de Donald Trump y el Departamento de Justicia estadounidense: esta compra fue aprobada tan solo horas después de que el Departamento de Justicia decidiera permitir el trato.
El trato de $85,000 millones de USD reunirá a múltiples propiedades de Time Warner, como HBO, CNN y Warner Bros., bajo un solo techo: en específico, una de las empresas más grandes en el campo de Internet, televisión y telefonía. Lamentablemente, esta compra podría crear conflictos de interés en cuestiones de favoritismo de contenido: en teoría, AT&T podría promover sus propios programas o películas sobre los de otras compañías.
Inicialmente, AT&T firmó un trato para adquirir a Time Warner en octubre de 2016, pero el cierre de dicho trato fue detenido debido a demandas del Departamento de Justicia estadounidense, ya que el organismo pensaba que consumidores sufrirían por precios elevados.
Sin embargo, un juez decidió esta semana a favor de AT&T, permitiendo que la compra sucediera sin condiciones adicionales: aunque el Departamento de Justicia podría haber apelado contra esta decisión, el organismo se negó a buscar una respuesta legal a esta situación.
Esta es una situación bastante similar a la que sucedería si Comcast, empresa que compite con AT&T, adquiriera las franquicias y propiedades de 21st Century Fox: debido a la aprobación de la compra de Time Warner, Comcast hizo pública una oferta a Fox por $65,000 millones de USD.
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