Gracias a que las relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos mejoraron recientemente, los cubanos podrán probar y adquirir gadgets estadounidenses. De acuerdo con la Casa Blanca, a partir del 16 de enero las empresas americanas podrán vender legalmente tecnología de consumo a los cubanos: desde teléfonos móviles hasta computadoras o televisores. Anterior a esta decisión, los residentes en Cuba sólo podían comprar tecnología de Estados Unidos sólo a contrabandistas o a turistas "generosos".
Es un cambio positivo, pero tal vez poca gente lo aproveche si consideramos que el salario promedio de un cubano no sobrepasa $20 o $30 USD al mes según un reporte de 2013. Por otro lado, se fabricarán más gadgets de los que los cubanos puedan pagar.
Esta iniciativa también beneficia a los turistas, quienes podrán adquirir tecnología estadounidense en la isla, y habrá menos restricciones para que sus tarjetas de crédito o débito sean aceptadas.
La decisión del gobierno estadounidense, diseñada principalmente para mejorar su comunicación con Cuba, podría también reducir la dependencia que la nación tiene con Etecsa, la empresa monopólica de telecomunicaciones encargada de proveer Internet a la isla.
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