Como toda actualización mayor, Windows 8.1 trajo interesantes características, pero al tratar de corregir algunos desperfectos, agregó otros, algunos muy graves. Por ejemplo, Microsoft admitió que entre los más recurrentes se encuentra una falla de desempeño del mouse en numerosos videojuegos y ciertas apps, que van desde simples aberraciones de movimiento hasta completa incompatibilidad.
La situación es diferente para cada tipo de usuario y depende completamente de la combinación de hardware o el tipo de juego. Aunque los ingenieros a cargo ya trabajan en una solución definitiva, la compañía explicó que hay alternativas para reducir la molestia, como deshabilitar el ajuste de escala de la pantalla cuando se usa la configuración elevada de ppp (está en las propiedades de compatibilidad de cada aplicación), si es que el puntero se detiene antes de llegar al borde de la pantalla.
Dentro del foro de asistencia técnica de Microsoft, un representante explicó la naturaleza del problema: "Antes que nada, queremos agradecer a nuestra comunidad por la detallada retroalimentación. No tenemos una fecha probable para el parche que corregirá estos problemas, pero estamos trabajando para encontrar una solución tan pronto como sea posible. El problema de "lag" en el mouse en realidad refiere a un conjunto de desperfectos que varían según el juego, el tipo de aplicación, la configuración de dispositivos, etc."
Para cada inconveniente hay una posible opción que se detalla punto por punto en el sitio oficial de Microsoft, pero en los casos más recurrentes, basta reinstalar el controlador del mouse y después, seleccionar modo nativo para purgar los errores de programación o simplemente, recurrir al confiable modo de compatibilidad con Windows XP.
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