Investigadores del Hospital de niños de Boston (Boston Children’s Hospital-BCH) encontraron que la cafeína y otra sustancia química estimulante ayudaban a los ratones de laboratorio privados del sueño a lidiar con el dolor. Ellos concluyeron que si queremos ayudar a las personas con el dolor crónico, primero debemos lidiar con la fatiga que sufren.
Los neurólogos y neurobiólogos privaron del sueño a sus ratones de laboratorio de manera crónica al entretenerlos con juguetes en las horas en las que normalmente estarían durmiendo.
Después, introdujeron a los ratones a diferentes formas de dolor y midieron cuánto tiempo les tomó alejarse de la fuente de los estímulos negativos. Mientras más se cansaban los ratones, más sensibles se hacían al dolor y reaccionaban más rápido.
Luego los científicos trataron a los ratones con drogas para ayudarlos a lidiar con el dolor. En lugar de responder a los aliviadores normales de dolor, como ibuprofeno o hasta morfina, los investigadores encontraron que los ratones respondían mejor a las drogas que les quitaban el sueño, como la cafeína o el modafilino.
Sin embargo, estas dos drogas no tuvieron un efecto analgésico en los ratones que sí estaban bien descansados. Esto confirma que ellos estaban aliviando la fatiga de los ratones en lugar de lidiar con el dolor.
Por último, aunque estos resultados no han sido demostrados todavía en humanos, los investigadores creen que el estudio subraya la importancia de ayudar a las personas que sufren de dolores crónicos a obtener el descanso que necesitan, de acuerdo con el especialista en sueño del BHC Kiran Maski.
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