Ricoh nunca ha tenido reservas al aplicar color en el diseño de sus cámaras, pero con la Pentax K-S1 ofrece más opciones cromáticas; además, complementa las tonalidades con un sistema de luces LED para informar acerca de qué modalidad está activa. Lo interesante de esta cámara con enfoque profesional es que aun si se trata de una DSRL con gran capacidad fotográfica, promete un uso muy amigable.
En su delgado cuerpo de apenas 7 milímetros (sin la lente), la K-S1 aloja un sensor APS-C capaz de capturar imágenes de 20 megapixeles, el cual se complementa con el procesador Prime MII para elevar la sensibilidad ISO hasta 51200. También hay un visor óptico basado en pentaprisma que ofrece 100% de visión y una magnificación de 0.95x. Adicionalmente, el obturador alcanza una velocidad máxima de 1/6000, lo que se traduce en 5.4 fotogramas por segundo.
Aunque esta Pentax de gama media tiene especificaciones muy respetables, fue creada para que los principiantes de la fotografía se familiaricen rápidamente con los equipos profesionales. Para lograra ese propósito, Ricoh simplificó la interfaz, así que ahora es más fácil acceder a los valores principales. Y para hacer más intuitiva la experiencia, los LED de la K-S1 cambian de color dependiendo de las funciones; por ejemplo, todo cambia a rojo cuando comienza la grabación. Que por cierto, la cámara genera video en resolución 1080p a 30 cuadros por segundo.
Ricoh sostiene que la Pentax K-S1 estará disponible a mediados de septiembre y que llegará en 2 versiones. Por otro lado, el cuerpo solo costará $749.95 USD y acompañado de una lente 18-55mm, $799.95 USD. Habrán 12 colores a elegir y queda la promesa de que será compatible con el sistema FLUcard para agregar Wi-Fi u otras funciones.
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