Aún actualmente es un gran desafío para los médicos capturar de manera exacta el interior del cuerpo humano, pues basta con que el paciente se mueva un poco para que el resultado sea impreciso, si se somete a un procedimiento de rayos X. Por fortuna, General Electric diseñó un sistema tomográfico más avanzado que, además de garantizar un incremento considerable en la exactitud de la imagen, produce menos radiación, así que es más seguro.
Para crear imágenes tan impresionantes y detalladas, El Revolution CT combina el escaneo por radiación tradicional con una cámara de alta precisión, la cual cuenta con motores que estabilizan el movimiento. Así, el análisis final no sólo es capaz de mostrar en tiempo real el latido del corazón, sino el funcionamiento de las venas o la reacción del sistema nervioso ante estímulos específicos. Los investigadores del hospital Wets Kendal, en Estados Unidos, dicen que se trata de un avance que ayudará a detectar mucho antes los tumores malignos, posibles fallas renales y el deterioro de los huesos, entre muchas otras cosas.
Sobra decir que la implementación de esta tecnología no es barata, pero la inversión justificará el beneficio para los pacientes.
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