Si eres fan de los cómics y las películas de superhéroes, seguramente cuentas los días para el próximo estreno de Deadpool —el 12 de febrero—. Aunque no seas fan, estoy seguro de que la película te ha llamado la atención, y no es accidental, 20th Century Fox se ha asegurado de eso.
En una charla telefónica con Salvador Baduy, encargado de relaciones públicas de 20th Century Fox México, nos dijo que la agresiva y efectiva campaña publicitaria de la cinta del mercenario bocazas fue pensada para hacer ruido, y vaya que lo logró.
Anteriormente, te habíamos hablado de cómo un espectacular de la cinta duró sólo 3 días antes de ser retirado por el Gobierno de la Ciudad de México. Fox sabía que esto iba a pasar y precisamente por eso lo hicieron. Por cierto, 90% de la publicidad que vemos en México fue generada aquí mismo, con una estrategia que va a tono con la promoción global, pero con características dirigidas específicamente para el público mexicano.
Seguramente ya viste el comercial más reciente de las famosas galletas de los guardias, pero de todas formas aquí va de nuevo.
Este anuncio fue autorizado por la producción de Deadpool, tomó aproximadamente 3 meses de planeación, fue filmado en Puebla y contó con un presupuesto millonario. Según me cuenta Salvador, fueron ellos quienes se acercaron a la marca Emperador, pues era perfecta para una colaboración así; hasta los colores del súper antihéroe combinan con el empaque de las galletas.
El comercial está en español y eso no agradó del todo a algunos fans que consideran que debió ser en inglés con subtítulos. Salvador —quien ya vio la película en su idioma original y doblada al español— me aseguró que el trabajo de doblaje para Deadpool es impecable. La cinta no presenta corte o censura de ningún tipo, todas las escenas de sexo y desnudos fueron respetadas, cada gota de sangre está ahí, cada grosería fue adaptada lo mejor posible en un esfuerzo conjunto entre el estudio de doblaje y la oficina local de Fox.
Todavía no he visto la película, pero ya puedo decir que su campaña publicitaria es la mejor que he visto en mucho tiempo: es original, irreverente, captura la atención de cualquiera y, sobre todo, es completamente fiel al personaje que interpreta Ryan Reynolds.
El Wade Wilson de los cómics es honesto, cómico, vulgar y tiene uno de los mejores súper poderes de todos: puede romper la cuarta pared. Esto significa que él sabe que es un personaje de cómics, sabe que alguien observa toda su vida, sabe que sus pensamientos están escritos en pequeñas cajas amarillas y esto lo hace sin igual.
Reynolds ha tomado su papel de protagonista muy en serio y rápidamente disipó cualquier duda que pudiera existir sobre su desempeño como uno de los personajes más populares de Marvel. Mediante las redes sociales del actor y de la misma Fox, no han dejado de lanzar imágenes, bromas y hasta videos que, sin decir una palabra sobre el argumento de la cinta, aumentan el hype de todos los fans.
Por eso, cuando Deadpool coquetea conmigo a través de la pantalla o habla sobre la importancia de la detección del cáncer en hombres y mujeres —muy a su estilo, sin pelos en la lengua al hablar de testículos y chichis—, sé que es el personaje quien habla y no solamente una casa productora con ganas de vender boletos de cine. Si la película es tan buena como su trailer y sus anuncios, Disney y Warner van a tener mucho que superar.
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