Si ayer estuviste muy ocupado u ocupada llorando por la muerte de David Bowie, tal vez no te enteraste que el domingo en la noche, The Revenant (El Renacido) ganó 3 Golden Globes: mejor director para Alejandro González Iñárritu, mejor actor de drama para Leonardo DiCaprio y mejor película.

Aunque la película todavía no se estrena en América Latina, en Estados Unidos ha sido alabada por la crítica y la audiencia, así que seguramente el próximo jueves 14 cuando se anuncien los nominados al Oscar, The Revenant se encontrará en varias categorías. El arduo trabajo de Iñárritu y todos los involucrados está rindiendo frutos, sin embargo, después de leer la entrevista que Wired le hizo a Leonardo DiCaprio, la expresión "arduo trabajo" parece quedarse corta. En pocas palabras, DiCaprio la pasó de la ching@%&$, junto con todo el equipo de producción.

Vienen algunos spoilers, aunque no revelan elementos clave de la trama, si no quieres saber absolutamente nada de lo que sucede en la película, te recomiendo no seguir leyendo.

The Revenant narra la historia real de de Hugh Glass, un cazador del siglo XIX que después de ser atacado por un oso, viaja cientos de kilómetros para vengarse del hombre que lo abandonó y dio por muerto.

La filmación duro 9 meses, durante los cuales el equipo de producción viajó a Tierra de Fuego, Argentina; Montana, Estados Unidos; Alberta, Canadá y Columbia Británica, Canadá. La bajas temperaturas y el abrupto terreno no fueron lo peor, lo más difícil era trasladar a todos a las remotas locaciones alejadas de la civilización.

Leonardo recuerda que en varias ocasiones se formaron tormentas de manera repentina, lo que hacía que la temperatura llegara a 40°C bajo cero. Otra gran complicación era la nieve, pues de un día a otro podía derretirse por completo, lo que los obligaba a buscar otro lugar para obtener las tomas justo como las quería el director.

Debido a que se encontraban inmersos en terreno salvaje, era imposible contar con iluminación artificial, así que había que grabar durante el día. Eso significaba que algunas escenas se ensayaban a lo largo del día, lo que muchas veces los dejaba con menos de 2 horas para obtener la toma perfecta. Si no lo lograban, debían esperar hasta el día siguiente para intentarlo de nuevo. Claramente, sólo Emmanuel Lubeski podría haber hecho un trabajo de cinematografía tan impecable como éste bajo esas circunstancias.

El actor también menciona que este ha sido el reto profesional más difícil y demandante de su vida y recuerda al menos 30 o 40 momentos en los que sobrepasó sus límites.

Uno de los momentos más impactantes y que más han dado de qué hablar, es cuando DiCaprio tuvo que comer el hígado crudo de un búfalo, a pesar de que es vegetariano. Ese es el grado de compromiso e inmersión que Leo aportó a la película. De hecho, considera que este papel es más un capítulo de su vida, que un trabajo de actuación.

El clima y la exigencia física no era todo lo que el reparto tenía que soportar, Leo también era sometido a 5 horas de maquillaje diariamente, eso incluía que se le colocara cera caliente en la barba para que al secarse pareciera escarcha.

Así que ya sabes, cuando vayas al cine a ver The Revenant, piensa en todo lo que los involucrados tuvieron que hacer para que esta increíble historia de supervivencia se vea y sienta como algo real. Sin duda, tal y como lo dijo González Iñárritu cuando recibió el Golden Globe a mejor director, "Leo es el héroe", pero no hay que olvidar a Tom Hardy y el resto del reparto que tuvo que quedarse un par de meses más que Leo en las congeladas locaciones para terminar de filmar.

Sólo nos queda esperar al 28 de febrero para ver si González Iñárritu y DiCaprio repiten la hazaña del pasado domingo en la edición 88 de los Premios de la Academia. Ojalá sea así, no hay duda de que se lo merecen.

Basta con ver el trailer para darse cuenta del gran trabajo que Iñárritu y compañía hicieron con esta película.