Con gran orgullo, la mayoría de los altos ejecutivos de Samsung presumen que su compañía es uno de los principales motores de la innovación en la industria tecnológica y que la mejor evidencia es que cada producto electrónico que producen se posiciona en los principales índices de popularidad. Curiosamente, el presidente ejecutivo, Lee Kun-hee, piensa que eso no es suficiente y que en particular, su descomunal plantilla de trabajadores hace muy poco en términos creativos.
Durante el discurso de Año nuevo que emite cíclicamente para sus empleados, el máximo representante de Samsung remarcó que la competencia se vuelve más feroz a cada momento y que en particular, durante 2013, los esfuerzos fueron extenuantes: "Los centros de investigación y desarrollo deben trabajar incansablemente, contra el reloj. Es tiempo de deshacernos de los viejos modelos de negocio y las estrategias de hace 5 o 10 años, para dejar de concentrarnos en el hardware. Tenemos que ser más agresivos en otras áreas de la tecnología e innovar genuinamente".
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La gran ironía es que si bien Samsung ostenta la corona en ventas de teléfonos, Android es uno de los principales productores de electrónicos a nivel mundial, pues el crecimiento del corporativo se ha dado en incrementos casi ínfimos. En particular durante el más reciente reporte financiero, correspondiente a finales de 2013, las ganancias fueron ejemplares y hasta rompieron records históricos, pero también se gastó demasiado en investigación, producción, manufactura y especialmente en publicidad. Basta recordar que tan sólo en mercadotecnia de los últimos 12 meses invirtió $14,000 MDD, es decir, mucho más de lo que Google pagó por Motorola.
El éxito de Samsung en el ámbito de los móviles es incuestionable y en el espacio de los televisores, o la línea blanca, mantiene una posición muy saludable. Desafortunadamente para la empresa surcoreana, sus márgenes de ganancia no siempre son los más altos y eso comienza a generar inquietud entre los inversionistas. En fechas recientes el valor de los activos en el mercado bursátil descendió un 10%, cifra considerable para una transnacional tan exitosa.
Una posible solución para Samsung, si es que dejan de favorecer tanto el hardware, podría llegar por parte de las estrategias digitales y en principio Tizen servirá para ese propósito, aunque para ello necesita de mucho apoyo de los desarrolladores. Como sea, es probable que durante CES 2014 se muestre un poco más de este supuesto cambio de dirección o que al menos se hable con detalle de la revitalización creativa.
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