Las lecciones y retos de Cinépolis Klic

Cinépolis presenta su alternativa para competir en los servicios de streaming

Después de que Cinépolis anunciara en octubre de 2012 su alternativa para entrar en el mercado del contenido por streaming, por fin esta mañana presentó Cinépolis Klic. Se trata de un servicio del estilo Netflix, Vudu, ClaroVideo o NuFlick con el que intentan competir y ganarse un espacio en el gusto del público. Este es el primer paso de la empresa para abrirse camino dentro de la actual oferta web.

Miremos los antecedentes. Hace aproximadamente 6 meses, el director de operaciones Alejandro Ramírez hizo pública su intención de entrar en el ruedo del streaming. Lo primero destacable de su decisión es que evidencia una comprensión integral del mercado. Para Cinépolis, el negocio principal son las salas de cine. Tienen la cadena más grande en América Latina, con presencia en México, buena parte de Centroamérica, Colombia, Brasil, Perú, Estados Unidos y un país asiático: India. A primera vista, lanzar un servicio de contenidos por streaming puede parecer competencia casi directa, pues ofrece un producto similar (películas) que apela a un mercado también similar; sin embargo, Ramírez no se encerró en este falso dilema.

Sí, un consumidor puede elegir ver una película en casa por diferentes razones en lugar de ir al cine, pero las decisiones entre asistir a una sala cinematográfica o rentar un filme no están peleadas. El público cinéfilo es diverso. Cinépolis vio en el streaming una oportunidad de negocio y de expansión, no una amenaza, y con ello le dio una lección importante a otras industrias -como la musical-: la convivencia es posible.

Cinépolis compendió que la experiencia del cine y la del streaming no son contrarias, sino complementarias

Ahora bien, en el trasfondo del asunto de las descargas hay un tema importante: el copyright. El mismo Ted Sarandos, jefe de contenido de Netflix, señaló que los servicios de streaming están ayudando a evitar el intercambio de material protegido por copyright. Aunque es cuestionable que las descargas estén afectando a la industria -a la fecha, es imposible comprobar que exista intención de compra al bajar un contenido-, es cierto que es un espacio que se está empezando a monetizar. Sarandos habló de ofrecer "buenas opciones" a los usuarios, quienes están dispuestos a hacer un pago justo que retribuya a la industria.

Cinépolis Klic entra en este juego de las alternativas legales en la industria del entretenimiento con un costo competitivo para catálogos como Netflix ($89 MXN) y un modelo de renta similar al de Vudu ($25 MXN por película). El suscriptor hace un pago mensual para acceder a una biblioteca (medianamente atractiva, por lo que se ve en su sitio web), con la posibilidad de hacer transacciones por unidad mediante renta por 48 horas de títulos más actuales.

Al respecto, Bárbara Anderson, directora de innovación de Grupo Milenio, señala que Cinépolis Klic tiene algunos ases bajo la manga, como el hecho de conocer bien a la audiencia mexicana; la curaduría del contenido; los beneficios cruzados entre el cine y el servicio de streaming (como descuentos); y los proveedores. Las 4 son características muy interesantes. Si comparamos Cinépolis Klic con Netflix, es posible que el primero destaque por entender mejor a la audiencia, y en consecuencia, por hacer una selección más cuidadosa del catálogo, así como por ofrecer promociones tanto para cine como para streaming. Por otro lado, Netflix va un paso adelante con el tema de las producciones originales, algo que se está convirtiendo en su ventaja competitiva a nivel mundial.

"Netflix pegó primero, pero quien podrá pegar 2 veces será Cinépolis." - Bárbara Anderson

Quizás el gran reto de Cinépolis Klic sea monetizar el servicio de rentas en línea, algo en lo que fracasó en México la iTunes Store y en lo que Vudu ahora invierte sus esfuerzos. Todavía hay una preferencia por lo físico -razón por la que Blockbuster sigue vigente en el país pese a su quiebra-, pero inevitablemente llegará un cambio de visión, y si consiguen actualizar su contenido rápidamente (algo en lo que no debería tener problemas gracias a sus acuerdos de distribución) es probable que la balanza se incline de su lado.

Cinépolis Klic espera llegar al medio millón de suscriptores en 2 años, una cifra nada despreciable. ¿Lo conseguirá? Por supuesto. La duda no es si tendrá una buena cantidad de usuarios, sino si será capaz de llevar su servicio a sectores donde, aún con la publicidad en televisión abierta, Netflix no ha llegado. Hay una constelación de factores -entre ellos, la penetración de banda ancha- que juegan en contra, pero si logra abrir mercado y salirse del nicho ultracompetido donde ahora se encuentra, podremos hablar de un éxito rotundo. Hasta entonces, todo se mantendrá nivelado.

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