Mediante un comunicado de prensa, BlackBerry informó que perdió $935 MDD en el segundo trimestre del año y señaló a su smartphone insignia, el Z10, como el culpable.
Por lo que se entiende en el documento, un exceso de inventario del dispositivo que no se ha vendido (y que pensamos que no quieren ni en las bodegas de las tiendas) es lo que provocó que las ganancias de BlackBerry disminuyeran hasta $1.6 MMDD. Si a lo anterior sumamos las pérdidas generadas por la reestructuración de la empresa, la cantidad asciende a $965 MDD.
Otro punto preocupante es que el documento sostiene que se vendieron 3.7 millones de dispositivos BlackBerry, pero la compañía admitió que gran parte de esos equipos son BB7, y no especificó cuántos B10 y Q10 se movilizaron.
Thorsten Heins, director general de BlackBerry, se dijo muy decepcionado con los resultados (¿quién no lo estaría?). Sin embargo, para intentar animar a sus trabajadores, afirmó que se registró un crecimiento en el número de clientes de su servicio de gestión para empresas, BES 10, por lo que hay un rayo de esperanza en ese negocio. Aunque, siendo honestos, no sabemos cuánto ayudará esta cifra a la empresa.
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