Frente a los cuestionamientos con respecto a la forma en que lograrán mantener un globo en un solo lugar para proveer el servicio de Internet en regiones remotas del mundo, como lo promete el ambicioso Project Loon de Google, la empresa tiene una respuesta.
De acuerdo con el equipo de Project Loon, puedan usar las corrientes de viento en cierto medida, en diferentes niveles de la estratósfera para controlar la dirección de los globos; de esa forma, el conjunto de estos en una zona específica no se separará demasiado. Así, las personas a las que se piensa dotar con el servicio no tendrán que esperar a que las corrientes de aire sean propicias para alinear las antenas, porque la distribución permanecerá uniforme.
Dan Piponi, miembro de Project Loon, explicó la técnica mediante la proyección de un video que muestra una simulación del funcionamiento del sistema. Básicamente, la idea es alimentar con datos de las corrientes de viento a las computadoras de los globos para que decidan cuándo incrementar o disminuir su altitud para entrar en un flujo de aire y así mantenerse en la zona indicada. Además, Piponi asegura que el conjunto de aerostatos puede viajar por el mundo de esta forma y aunque se separen demasiado, mantienen un servicio de Internet estable.
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