Actualmente, sabemos que gracias a la implementación de diversas normas sanitarias en México ha provocado grandes cambios en la manera en que las empresas operaban, modificando completamente el trabajo en oficina, cambiando a un modelo de home office, mismo que ya se implementaba en algunas compañías, como es el caso de Facebook o Google.
Estos dieron el ejemplo de qué es lo que se debería hacer, primero instalando oficinas cómodas, con centros de trabajo abiertos en donde directivos y trabajadores interactuaban de una manera más sana y compartida manteniendo el pensamiento de “queremos que su oficina se convierta en su segunda casa, donde se sientan cómodos y trabajen como quieran hacerlo” se leía en un comunicado de Google hace un par de años.
Adicional, vieron la oportunidad de darles uno o dos días de trabajo para realizar home office, para que, desde su casa, trabajaran, se acoplaran y así, mejorar su rendimiento mucho más de lo esperado, cosa que muchas empresas en México no tomaban en cuenta, hasta que la nación del COVID-19 atacó y obligó a cambiar la vida Godínez que todos tenían.
De acuerdo con Richard Poore, Director Regional de Ventas de Digital Workspace Company (DWS), este mismo virus fomentó un cambio inmediato, para que todas las empresas optaran por un modo de trabajo a distancia “esta migración apresurada, nos indica que en las empresas, aún hay grandes desafíos por cumplir” comenta el directivo.
Así es como se plantea la siguiente pregunta ¿Cómo enfrentarse a este reto durante y después de la pandemia?
Para esto, se deben tomar en cuenta diferentes datos a evaluar, así como un análisis de los elementos de trabajo que cada empresa dispone, así como tener una serie de herramientas tecnológicas para poder tener una buena migración.
Aunque esto dependerá de cada empresa, ya que cada empleado tiene una función específica, así como las herramientas que utilizarán, por ejemplo, si es en un call center, deberán contar con una computadora y diadema ideal para poder trabajar como lo hacía en su oficina, aunque para otros podría ser más sencillo, se debe tener esta evaluación y contemplar estos escenarios.
“Se debe realizar una adopción total del trabajo remoto integrando todas las herramientas y aplicaciones que ya se utilizan dentro de la empresa, y en dado caso de que no se cuente con esto, se puede aplicar una migración a una versión digital, que pueda ser una aplicación parcial, pero que incluya todas las soluciones que sean necesarias para trabajar” agrega Richard Poore.
En este caso, el mismo directivo recomienda emplear Microsoft 365 o Google G-Suite, que son dos de las herramientas más completas para poder gestionar y coordinar casi cualquier trabajo a distancia. Aunque claro, también existen plataformas enfocadas a realizar diferentes actividades enfocadas al giro de cada empresa, mismas que solo funcionarían para un ámbito en específico y no de manera general como las ya mencionadas.
Así es como se debe tener en cuenta que entre más complejas sean las plataformas, también lo será el nivel de configuración y seguridad que los usuarios necesitan para trabajar en su casa, pensando en una capacitación y a personal dedicado a resolver dudas sobre el funcionamiento de las mismas.
Así es como los análisis internos de la misma empresa, deben ser detallados, así como conocer perfectamente todos los procesos que se llevan a cabo, para crear herramientas enfocadas a dar una mejor operación para cada elemento, y así no se pierda esa continuidad de los mismos.
De esta manera, las empresas que ya contaban con un modelo parecido o ya tenían una transformación digital vital para sus procesos de trabajo, podrán adaptarse de una mejor manera, aunque para las que no lo han hecho, tendrán que trabajar sobre la marcha para aprender esto mismo, lo que será muy difícil y complicado, además de requerir una inversión adicional.
“El trabajo a distancia es una inversión, y la realidad indica que las empresas que más rápido se adapten a esta situación, van a ser las que tengan mayores posibilidades de sobrevivir” finaliza Poore.
¿Crees que se mantendrá el home office después de la cuarentena? ¿Crees que se recupere la economía frente a los más de 600 mil empleos perdidos? ¿Cómo crees que esta pandemia modificará el trabajo dentro de las empresas?
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