Las impresoras 3D son una maravilla: pueden imprimir paneles solares, vestidos, pistolas y hasta cabezas humanas. La NASA planea usar esta tecnología para crear comida espacial y brindar una mejor alimentación a los astronautas.
Para lograr su objetivo, la agencia dio una beca de $125,000 USD a la compañía Systems & Materials Research Corporation. Su dueño, Anjan Contractor, es quien ha impulsado la investigación de cómo imprimir comida en el espacio con una máquina que funciona con cartuchos de polvos de alimentos. Una vez que son mezclados e impresos, forman cualquier tipo de comida, de acuerdo a lo que informó el sitio de noticias Quartz.
La ventaja de estos cartuchos con polvos alimenticios es que tienen una durabilidad de hasta 30 años. Razón por la cual Contractor piensa que ésta creación no solo ayudará a la conquista del espacio exterior, sino a algo mucho más ambicioso y quizá mucho más importante: exterminar el hambre en el mundo.
La idea que tiene el ingeniero es que en un futuro no muy lejano las familias de cada rincón del planeta tengan una de estas impresoras en su hogar, que las tiendas vendan los cartuchos y así se pueda combatir el hambre con alimentos bajo pedido.
Para lograrlo, la impresora de Contractor tiene que imprimir alimentos muy complejos. De momento ya puede hacer una galleta cubierta con chocolate, el siguiente paso es fabricar una pizza.
Pero no creas que la compañía escoge los alimentos con los que experimenta por puro antojo. La pizza fue elegida porque está hecha con capas. La máquina imprimirá primero la masa, esta se irá cocinando al mismo tiempo que es imprimida y luego polvos de tomate, aceite y agua crearán salsa de tomate. La última fase será una capa de proteínas, la cual aún está por ser determinada.
Claro está que el proyecto está en sus primeras etapas de desarrollo, pero si al final resulta ser un éxito, serán más las personas que se sumen a la idea de que la impresión 3D es la nueva revolución industrial.
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