A los alarmistas les encanta decir que Nintendo está en camino a la perdición —de hecho es una frase favorita de los haters— y que ya ni debería estar en el negocio de las consolas. ¿La razón? Que el Wii U no está vendiéndose igual que sus rivales: PlayStation 4 y Xbox One.
Obvio decir que Nintendo ya está en el hoyo es irse a los extremos, pero la realidad es que las ventas sí han sido pésimas. Aunque los fans defiendan hasta la muerte a la compañía, a sus juegos y a sus creaciones de hardware, Nintendo mismo lo muestra en sus estadísticas oficiales:
Aún si el número ya es viejo —de septiembre de 2015—, la situación actual de la consola no ha cambiado mucho, pues desde entonces se vendieron un adicional de 2 millones de unidades, gracias a la inmensa popularidad de los amiibos. Pero sin ese fenómeno, que se está volviendo problemático en algunos juegos, el Wii U seguiría estancado.
Sin darle mucho la vuelta al asunto, el Wii U es la consola peor vendida en la historia de Nintendo —podríamos decir que el Virtual Boy no cuenta porque era más experimento, que negocio formal—. Y es que con el Wii U las cosas no salieron tan bien como Satoru Iwata y su gente esperaban.
Eso no significa que es el final para Nintendo. Lo mismo pasó en la época del GameCube —la segunda peor vendida de Nintendo—, pues se enfrentó al primer Xbox y al titán de su era: el PlayStation 2. En la generación actual el Wii U falló al apostar por un nuevo esquema de control y dejar en segundo plano los gráficos, justo como hizo el Wii, el problema es que la fórmula ya estaba desgastada y la gente sabía qué esperar: juegos third party que no aprovecharían el potencial del GamePad. Además, el concepto de "control / tablet" fue difícil de asimilar para mucha gente desde el principio. En general, el contexto era muy diferente a la visión que tenía Nintendo.
El NX es la promesa de tiempos mejores para los fans de Nintendo, no sólo porque tendrá ideas que no se pudieron usar con el Wii U, sino que será la oportunidad para que se corrijan muchos errores... ahora sólo falta esperar que no se comentan nuevos.
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