Durante los últimos años, Elon Musk ha mostrado demasiado interés en llegar a Marte y ahora sabemos la razón. No es porque quiera impulsar la investigación científica en el área espacial —bueno... tal vez sí—, sino que busca apoderarse del planeta rojo. O al menos eso parece, pues hasta ya tiene planes de cómo hacerlo habitable.
En una entrevista para The Late Show con el siempre sarcástico Stephen Colbert, Elon Musk explicó a grandes rasgos que la idea de colonizar Marte tiene mucho sentido, porque hay varias formas de transformar la atmósfera del planeta para que sea útil para la humanidad. Lo curioso es que para él hay que hacerlo de la manera rápida: bombardeando el planeta con armas termonucleares, pues así el proceso tardaría de 2 a 3 años —las vacaciones en Marte ya no se ven tan lejanas—.
Con ese método cualquier tipo de vida, si es que existe en la superficie, sería aniquilada al instante. Obviamente sería un problema para que los científicos sigan estudiando el contexto por el que Marte perdió su atmósfera original, pero si lo vemos desde la perspectiva utilitaria, eliminaría cualquier impedimento biológico para colonizar —lo siento pacíficos y benevolentes marcianos, tenía que hacerse—.
Hablando de maldad, Colbert reaccionó ante la sugerencia de Musk al decirle que eso es algo digno de un súper villano, como Lex Luthor. Irónico, cuando todo mundo compara al magnate creador de SpaceX y Tesla Motors con Tony Stark. Lo importante es que para Musk, Marte es un terreno baldío con mucho valor, "simplemente hay que trabajarlo un poco".
La otra alternativa para convertir a Marte en un lugar habitable es inundarlo con gases de invernadero (dióxido de carbono, metano, ozono, etc.), el problema es que la transformación de la atmósfera tardaría algunos siglos, pues muchos de esos componentes químicos tendrían que importarse de otros planetas y asteroides.
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