Más que por usar un único puerto USB Type-C, la nueva MacBook está recibiendo muchas críticas debido a que su procesador Core M ofrece un desempeño muy bajo en comparación con la MacBook Air. Con base en un benchmark de AnandTech, el rendimiento es muy dependiente de otros factores, no sólo del tipo de arquitectura que desarrolló Intel. Ahora bien, los ingenieros de este sitio especializado todavía no tienen un ejemplar de la nueva MacBook —de hecho, ningún periodista la ha recibido—, así que hicieron las pruebas con un equipo que tiene especificaciones equivalentes: la Lenovo Yoga 3 Pro.
Más allá de lo que muestran los números, en el reporte explican que la potencia base del Core M no se compara con un Core i5 de cuarta generación (Haswell), pero que al ejecutar tareas sencillas, como abrir aplicaciones, navegar en Internet o editar documentos de ofimática, como Word y Excel, la diferencia es mínima. Es más, en algunos casos la manufactura de 14 nanómetros del Core M es tan eficiente, que supera a un Core i5-4200U. Por otra parte, el análisis confirma que los 8 GB en RAM y la unidad de estado sólido PC hacen que el desempeño de la nueva MacBook sea ligeramente superior que el de la MacBook Air en cuanto a funcionamiento del sistema operativo.
Fuente: AnandTech
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