Las selfies podrán parecer simplemente una manera más de ejercer el culto a uno mismo, pero no quiere decir que carezcan de significado. Los expertos en cultura digital, Lev Manovich y Daniel Goddemeye, se dedicaron a llevar a cabo estudios acerca de esta práctica.
El proyecto, que integraba a otros 6 participantes, se llama Selfiecity. La idea era analizar Instagram para encontrar selfies y estudiarlas. Sin embargo, se centraron solamente en las imágenes obtenidas en Nueva York, São Paulo, Moscú, Bangkok y Berlín. Dado que el número de fotografías era bastante elevado, se limitaron a revisar 640 imágenes capturadas en cada una de esas ciudades.
Los expertos encontraron que la edad media de quienes toman una selfie es de 23.7 años. Las mujeres son más propensas a capturar una foto de ellas mismas, pero sólo hasta los 30 años. A partir de esa edad, es más común que los hombres lo hagan.
Lo más interesante y que tal vez haya pasado desapercibido para ustedes, tiene que ver con la posición de la cabeza de los sujetos de las selfies. Generalmente, las mujeres la inclinan 150% más veces que los hombres. Por otro lado, la media en grados de inclinación es 12.3°, en el caso de ellas, y 8.2° en el caso de los varones. De las ciudades analizadas, las brasileñas presentaron la mayor inclinación: 16.9° en promedio.
Para concluir, del total de fotografías analizadas, sólo 4% correspondieron a selfies. No se reporta cuáles eran los temas del resto, pero podemos apostar a que vieron muchos pies, postres, platos de comida, gatos y tazas de té.
Deja tu comentario