Mientras que la mayoría de los fabricantes de televisores se mudaron definitivamente al LCD, Panasonic permaneció como el bastión más sólido del plasma, al ofrecer calidad visual suprema con cada modelo. Sin embargo, tras una serie de complicaciones financieras la compañía nipona dejará de producir este tipo de paneles en marzo de 2014. Afortunadamente, los esfuerzos se concentrarán en mejorar la manufactura del OLED con el fin de abaratarlo.
Los directivos de Panasonic explicaron que si bien los costos de fabricación del plasma están en índices muy bajos, aún se encuentran muy por encima del LCD, además de que la demanda ha disminuido considerablemente en los últimos años: “Debido a los drásticos cambios en el actual clima de negocios, y a la baja demanda por los paneles de plasma en el mercado de las pantallas planas, se ha determinado que continuar con este negocio representaría grandes dificultades para la empresa”.
Es lamentable porque una de las virtudes más admirables del plasma es que cuesta menos que el LCD de LED e incluso, ofrece una calidad superior de imagen, gracias a contrastes excepcionalmente profundos y un brillo más natural, sin olvidar que está libre del molesto desenfoque de movimiento (o motion blur). En la práctica, sólo el OLED supera las cualidades del plasma, el problema es que es mucho más costoso y faltan varios años para que tenga un precio accesible para el consumidor promedio.
Durante CES 2013, el vicepresidente de la división de pantallas de Panasonic, Herny Hauser, dijo que su empresa está comprometida con brindar productos de calidad a precios accesibles, pero antes de lanzar su primera OLED necesita asegurarse de que la producción será sustentable. Por tal razón, podrían transcurrir muchos meses antes de que veamos el primer televisor bajo la nueva iniciativa.
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