La mayoría de los sistemas de seguridad para motociclistas requieren instalar sensores en la moto para activarse a tiempo. Pero a la empresa Dainese se le ocurrió un método más efectivo: la D-air Misano 1000, una chamarra equipada con un sistema airbag electrónico autónomo.
Los sensores, la electrónica y el GPS se alojan en el interior del protector de espalda, para activar una bolsa de aire que separa al piloto 5 cm de cualquier superficie, lo que garantiza máxima protección y gran comodidad.
Un microprocesador analiza la información de los sensores instalados y efectúa un seguimiento de la dinámica del motociclista 800 veces por segundo, así que tiene un mucho tiempo de respuesta para decidir si activa el sistema en presencia de golpes, resbalones o caídas.
La chamarra está diseñada para proteger la clavícula, el pecho y la espalda del piloto, al mismo tiempo que limita la hiperflexión y la hiperextensión del cuello.
La bolsa de aire vestible ha demostrado su efectividad en 1000 pruebas. Saldrá al mercado en noviembre a un precio aproximado de $1700 dólares.
Deja tu comentario