Artículo publicado originalmente en Tomatazos.
Hace más de 40 años, George Lucas ideó un universo que dio una de las trilogías más exitosas y emblemáticas de la historia del cine. La fuente de dinero de Star Wars no podía quedar ahí y una trilogía de precuelas le siguieron, pero luego Disney se hizo con los derechos de la saga y una nueva serie de películas comenzaron a ser planeadas, pero a medio camino el show se les fue de las manos a ojos de los fans y ahora Bob Iger admite que sobreexplotaron la propiedad.
En entrevista con The New York Times, Bob Iger, presidente de Disney, admitió que cree que la razón por la que la gente no ha quedado tan contenta con las últimas dos entregas, Han Solo: Una Historia de Star Wars - 56% y Star Wars: Los Últimos Jedi - 91%, fue porque sacaron demasiadas películas demasiado pronto, lo que llevó a una buena parte de la audiencia a sentirse sobrecogida por la saga que empezó con el buen Luke Skywalker.
Creo que puede que hayamos sacado de más muy pronto en el mercado y muy rápido. Creo que las capacidades de contar de historias de la compañía son interminables por todo el talento que tenemos en la compañía y el talento que tenemos es mejor que nunca, en parte por el flujo de personas que recibimos de Fox.
La teoría del hartazgo llega luego de que Han Solo, tras una turbulenta producción que vio el reemplazo de sus director por Ron Howard, recaudara menos de US$400 millones a nivel global. Esto luego de que Star Wars: El Despertar de la Fuerza - 92%, su secuela y el spin off Rogue One: Una Historia de Star Wars - 85%, todas, rebasaran la marca de los US$1,000 millones. Pero, ¿puede realmente culparse a la abundancia de filmes sobre la franquicia?
Star Wars lanzó una película al año desde 2015, cuando la primera de las secuelas llegó a cartelera. Marvel, en comparación, publica entre dos y tres películas al año desde 2014 y esa saga no hace más que arrasar con la taquilla, la crítica y el público. ¿Qué es lo que puede pasar entonces con nuestra Galaxia lejana favorita? Quizá realmente sea que no supieron bien elegir a los realizadores detrás de sus nuevas historias.
J.J. Abrams, quien regresó para el Episodio XIX, fue algo criticado por hacer lo que algunos llaman una copia de la primera cinta y luego Rian Johnson recibió todavía más descontento por alejarse de lo que su colega hizo con la primera parte. Muchos pensaban que la película sobre Solo era innecesaria y los números indican que realmente lo fue para gran parte de la audiencia. ¿Hay una respuesta definitiva? Quizá no, pero Kathleen Kennedy, presidenta de Lucasfilm, ha decidido irse con más calma en el lanzamiento de los proyectos.
Sabemos que Star Wars: The Rise of Skywalker será la última de la saga de esa familia espacial, pero todavía hay otras dos trilogías en desarrollo. Una de ellas llegará en 2021 y cada dos años regresará con la siguiente parte. ¿Podrá ese mejor ritmo aliviar la tensión en el estudio? No queda más que esperar al 21 de diciembre a ver si el Episodio IX logra revivir el furor por Star Wars o si más bien confirma que ya no hay cariño para los sables de luz entre las nuevas generaciones y es momento de hacer como Kylo Ren y dejar morir el pasado.
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