Esta semana, las acciones de Tesla presentaron un impresionante incremento, alcanzando un nuevo récord de $376 USD la acción. Es así que este viernes, los inversionistas valuaron a Tesla en poco más de $61,600 MDD, lo suficiente para rebasar los $61,200 MDD con los que está valuada BMW y alcanzar el cuarto puesto en la lista de las compañías automotrices con más valor en el mercado. Solo Toyota, Daimler y Volkswagen están por encima de Tesla.
Esta situación es difícil de entender cuando solo observamos las ventas de ambas compañías: BMW entregó más de dos millones de autos el año pasado, mientras que Tesla entregó menos de 80 mil vehículos en el mismo periodo. Además, con esas ventas, en 2016 BMW generó $7,700 MDD en ingresos mientras que Tesla perdió $725 MDD.
Sin embargo, uno de los factores que influyeron en el aumento de las acciones de Tesla fue las declaraciones hechas por Elon Musk, CEO de la compañía. Musk aseguró este martes a sus inversionistas que su auto más económico, el Model 3, comenzará su producción en julio, de acuerdo con lo planeado. Además, el CEO piensa que dentro de los próximos dos a tres años, Tesla introducirá al mercado un modelo todavía más asequibl: el Model Y. Este vehículo, eventualmente, aumentará su demanda y necesitará su propia planta ensambladora, de acuerdo con Musk.
¿Esto quiere decir que los inversionistas están pensando en el futuro y no en el presente? Pues sí, pareciera que esto es exactamente lo que está ocurriendo, pues de acuerdo con las predicciones, Tesla podría alcanzar una producción anual de 1 millón de autos para 2020.
Aun así, es verdad que el mercado de valores se basa en gran medida en la especulación y no necesariamente en los datos duros. Es verdad que BMW es mucho más importante que Tesla actualmente, ya revisamos los números de ingresos y la producción, pero la curva de crecimiento de Tesla es lo que en verdad llama la atención de los inversionistas.
Sin embargo, tal vez BMW —y las demás marcas— sí debería preocuparse si observamos uno de los análisis realizados por la empresa Social Capital. Estos datos muestran que el Model 3 de Tesla ya está robando parte del mercado que antes estaba con el Serie 3 de BMW:
Por otra parte, Tesla dejó hace tiempo de enfocarse solo en los vehículos y comenzó a desarrollar otros productos como las tejas solares o los paneles solares para las casas, las baterías y las estaciones de carga-
De esta manera, es difícil definir a Tesla como una compañía automotriz, pero las comparaciones siempre dan de qué hablar. A fin de cuentas, el valor económico de una compañía termina por ser relevante en mayor medida para los inversionistas. A nosotros, como consumidores, nos queda observar las tendencias y valorar la innovación y el atrevimiento de las compañías como Tesla. ¿Quién pensaría que el negocio de los autos eléctricos llegaría tan lejos en tan poco tiempo?
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