Las exportaciones de relojes suizos han caído por tercer año consecutivo, esto no había pasado desde 1930, justo durante la Gran Depresión.
Los expertos atribuyen esta caída a los siguientes factores. Primero, las importaciones estadunidenses han caído 28%, mientras más y más personas abandonan los relojes o los cambian por un Apple Watch. La sobreproducción y el sobreprecio están forzando los relojes hacia el mercado gris y la gente más joven no compra relojes con los vendedores oficiales sino que prefiere hacerlo en línea.
Las ventas de relojes han ya habían caído antes. La crisis del cuarzo afectó a la industria en 1975 y cayeron de nuevo en 1982 y en 1995. Además, la reciente recesión frenó nuevas ventas mientras los comerciantes vendieron sus lujosos relojes Rolex y Patek a un bajo precio para conseguir efectivo. Aunado a esta situación se encuentra la reciente tendencia de los relojes inteligentes.
Joe Thompson, de la revista Watchtime, comentó al respecto:
Hablé con docenas de ejecutivos y minoristas relojeros: el consenso es que la industria está débil
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