Según reportes de The Wall Street Journal, el Galaxy S8 de Samsung utilizará baterías hechas por Sony. Aparentemente, esto es parte de la estrategia de la compañía sudcoreana para alejarse de la mala publicidad que se ganó el año pasado por el pequeño detalle de que las baterías de sus Note 7 tendían a explotar y causar fuegos alimentados por litio.
Lo interesante es que, según algunas otras fuentes, Samsung planea seguir utilizando baterías fabricadas por Amperex Technologíes y por una de sus empresas filiales, que son los responsables de la fabricación de las baterías explosivas en cuestión. La situación con estas baterías obligó a Samsung a retirar del mercado más de 2.5 millones de Galaxy Note 7 y a descontinuar el dispositivo después de que los teléfonos de repuesto que mandó, también comenzaron a explotar.
Según la investigación de Samsung, el problema provenía del hecho de que la protección de las baterías era muy corta, lo que causaba que el electrodo negativo se doblara y causara cortos, que a su vez se traducían en incendios. Al final, Samsung terminó creando un Grupo Consejero de Baterías, formado por consejeros externos, investigadores y académicos encargados de revisa los procedimientos y procesos de seguridad de las baterías. La presentación del Galaxy 8 se hará en marzo.
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