Hace muchos años, cuando las tarjetas de crédito y débito no existían, la gente solía pagar con efectivo prácticamente todas sus transacciones. Sin embargo, con el avance de la tecnología y el auge de las tarjetas, el dinero empezó a cambiar de ser algo material, a simplemente un concepto digital. Y según algunas personas, este cambio de paradigma incentiva a la gente a gastar irresponsablemente. La compañía NewDealDesign diseño Scrip, un concepto de tarjeta/cartera que hace que vuelvas a "sentir" al gastar.
Jaeha Yoo, director de diseño de Scrip comentó la justificación del producto.
"Tengo un hijo de dos años y medio, y me puse a pensar... en esta época cuando pago cosas con mi smartwatch, mi hijo crecerá sin entender por qué está bien comprar cosas de $5 dólares. pero no cosas de $25 dólares. Es un mismo 'clic'".
Yoo citó algunos estudios que aseguran que gastar efectivo causa dolor real en las personas. Debido a que las transferencias electrónicas son inmateriales, no hay dolor, por lo tanto no hay conciencia a la hora de hacer gastos. Según el director, crear un dispositivo que emulara las transacciones materiales podría ayudar a crear conciencia de ahorro.
Mientras tanto las compras electrónicas son una tendencia que seguirá creciendo de manera exponencial en los próximos años y aunque todavía no hay un estándar universal, Square es uno de los que lleva la delantera en cuanto a infraestructura y aceptación en negocios a escala global.
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Así nació Scrip. Este dispositivo-concepto es una especie de cartera/tarjeta, la cual —además de verse elegante y minimalista— permitiría hacer transferencias electrónicas, pero con un interesante giro. La persona que paga tendría que desilzar su dedo para seleccionar la cantidad de la transferencia, según decenas o unidades. Así, para pagar algo de $37 dólares, uno tendría que deslizar 3 veces (decenas), una vez (5 unidades) y 2 veces (2 unidades). Al presionar OK, la cantidad de dinero sería restada de la cuenta conectada con el dispositivo. El concepto también incluye otras características, como la posibilidad de hacer transferencias tocando otros Scrip o ver la cantidad de dinero que hay en la cuenta conectada. Al tener que deslizar varias veces para comprar algo, las personas "sentirían" el gasto real, más allá de solo pasar una tarjeta y firmar.
Lamentablemente, todo indica que Scrip solo será un experimento social y no realmente un producto que busque fabricarse masivamente. Ya ha habido otros dispositivos que cambian las maneras de pagar electrónicamente, y han estado muy lejos de tener éxito.
Al parecer las tarjetas y las transferencias electrónicas son el presente y el futuro de la economía mundial. No obstante, es interesante saber que en alguna parte hay compañías que se preocupan por lograr que gastemos menos, y no al revés.
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