Las memorias flash USB son un artículo que la mayoría seguimos usando, por su practicidad, portabilidad, caben en cualquier lugar y puedes tener acceso a tu información donde sea. Los únicos desperfectos que podemos encontrarles son la lenta velocidad de transferencia y la poca capacidad que algunas presentan. Si ya no tienes tanto espacio en tu memoria USB de batalla, no te preocupes, con los siguientes pasos conseguirás algunos megas de almacenamiento extras para que así no tengas que comprar otra de más capacidad. Únicamente necesitas:
- Una PC con Windows 7, 8 o 10
- Una unidad flash USB de cualquier capacidad —aunque este "truco" está pensado para las de menor capacidad, por obvias razones (8GB o 16GB)—
- Tiempo. El proceso no es inmediato y depende de varios factores
Lo primero que tienes que hacer es abrir la ventana del Explorador de archivos , y luego dar clic en la sección Este equipo (nombrada en Windows 7 como Computadora).
Después, debes identificar la memoria que sometarás a este proceso. Una vez que lo hayas hecho, da clic derecho sobre el icono de la memoria y pulsa sobre Formatear —ojo: si no quieres perder tus datos, respáldalos con anterioridad—.
A continuación se abrirá una nueva ventana. Allí tienes que escoger, en Sistema de archivos, NTFS. En seguida marca la casilla Formato rápido y presiona con el cursor en Iniciar.
Cuando finalice el formateo, deberás regresar al Explorador de archivos y de nuevo dar clic derecho sobre la memoria, pero ahora hay que pulsar en Propiedades. Se desplegará otra ventana. En ésta hay que tildar la casilla Comprimir esta unidad para ahorrar espacio en disco y dar clic en en Aceptar. Inmediatamente surgirá una ventana de confirmación donde tienes que seleccionar Aplicar cambios a la unidad (la letra de tu unidad):\ y a todas las subcarpetas y archivos.
Espera a que termine la compresión, y listo. Para comprobar que todo salió de forma correcta, vuelve a abrir la ventana de Propiedades de la memoria y verás el tamaño real de tus archivos y el que realmente ocupa en el disco.
Cualquier archivo que se copie o guarde en la memoria USB después de este proceso será comprimido (obtendrás cierto espacio dependiendo del archivo), gracias a que Windows utiliza una compresión dinámica de alta velocidad. Los archivos se comportarán y verán como normalmente lo hacen.
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