Es curioso lo que pasa con los posters de películas: es fácil pensar que son artificios que se prestan a la innovación —y en cierta medida, lo hacen—, pero en realidad no es así. En la mayor parte de los casos, pareciera que los encargados de elaborar este tipo de publicidad se ponen de acuerdo y utilizan una misma plantilla o modelo. Para comprobar esto, sólo hay que fijar la mirada en la infinidad de posters cuyo foco de atención son ojos o piernas de una mujer, o una pareja recostada sobre una cama; en ellos, es más que descarada la utilización de una fórmula. ¿Cómo es que en una industria que genera millones de dólares pasa esto?
Aunque a primera vista pareciera que este fenómeno se debe a falta de creatividad —y así es, hasta cierto punto—, hay que entender que el motivo principal es la naturaleza del cine actual: es un negocio, y como tal, debe seguir sus propias tendencias, pues eso asegura que un producto tenga éxito entre los títulos que son lanzados semanalmente. Los pósters necesitan ser familiares para que el público los digiera con facilidad.
Otra causa por la cual los posters no pueden alejarse de las normas tiene que ver con términos legales. A veces, existen cláusulas en los contratos que dictan la manera en cómo deben realizarse los carteles. Por más que se esfuercen en hacer una obra de arte, al final, los creativos tienen que atenerse a lo estipulado. Poner el rostro de un actor de renombre a lo largo y ancho de un poster vende más que cualquier otra cosa, por más creativa que sea.
Entre las tendencias que últimamente permean en algunos posters encontramos la utilización de logotipos y caras gigantes y la contraposición de los protagonistas, cara a cara.
¿Nada nuevo, verdad? ¿Recuerdas los carteles de Jurassic Park? Este hecho nos habla de que las tendencias son cíclicas, es decir, luego de ser utilizadas durante una época, son reemplazadas por otras que poco a poco se convierten en norma, y tiempo después, se retoman.
¿Cuál será la siguiente moda que veremos en los posters de películas? Es muy difícil saber la respuesta, ya que el gusto de la gente es muy variado y casi impredecible. Fox Searchlight Pictures pretende establecer una nueva mediante el cartel de su reciente filme The Birth of a Nation —el cual fue estrenado en el Festival de Cine de Sundance de este año—.
Con el "living poster" anterior —que podemos traducir como "poster viviente"— Searchlight está tratando de cimentar una nueva forma de publicidad, convertirla en norma. A pesar de que ya se había visto un intento parecido en los posters de The Hunger Games: Catching Fire —un clip de un clip de 5 segundos de animación Flash—, ahora observamos que The Birth of a Nation lo lleva un paso más allá, tiene más consistencia.
Cabe la posibilidad de que los "living posters" sean adoptados por más estudios cinematográficos, representan una alternativa para el desenvolvimiento de la creatividad de aquellos que se dedican a la creación de posters. Pero su uso, asimismo, corre el riesgo de que transformarse en un círculo vicioso, donde, al igual que en los carteles convencionales, las ideas se repitan una y otra vez.
¿Y tú qué opinas, crees que los "posters vivientes" llegarán para quedarse o sólo se volverán una forma publicitaria del montón?
Deja tu comentario