Aquí hay algo que tal vez no imaginabas de Kanye West, pero que se veía venir: está sumergido hasta el cuello en una deuda de $53 millones de dólares. A casi nadie debería importarle que Yeezus recibirá muy pronto a los matones rompe piernas en la puerta de su casa —si acaso sólo a sus fans—, pero el hombre está preocupado y con la justificación de que además va a financiar sus "brillantes ideas", corrió con Mark Zuckerberg para pedirle un pequeño préstamo de $1000 millones de dólares.
"Mark Zuckerberg, invierte en $1 mil millones de dólares en las ideas de Kanye West"
"Después de darte cuenta que es el más grandioso artista vivo y de toda la historia"
"Mark Zuckerberg sé que es tu cumple, pero por favor ¿podrías echarme una llamada mañana?..."
Bueno, no es exactamente dinero prestado, sino inversión, pues Kanye dice que todos esos recursos monetarios servirán para potencializar su genialidad, como la que puso en The Life of Pablo.
Lo curioso es que el músico más grande de todos los tiempos dice que está harto de Silicon Valley y sus obras de caridad ridículas en "el país África", cuando "hay verdaderos artistas que necesitan ayuda".
Porque claro, es mejor ayudar al rapero con el ego más grande del universo, que tratar de apoyar a las naciones pobres. Kanye lo cree y dice que sabe que él puede hacer una diferencia, sobre todo después de hacer lo imposible al retomar el trono del rap y vencer a todos en el juego de la moda.
Ah y Yeez también quiere la ayuda de Larry Page.
Vamos Kayne... ¿por qué no mejor haces un reality show? Le queda mejor a tu personalidad.
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