Todos hemos tenido vecinos insoportables, pero entre los peores están esos que a las 3 de la mañana le suben a todo el volumen y peor aún, con música que aborreces. A Kevin justo eso le pasó… varias veces, en diferentes casas en las que ha vivido. Así que harto de la maldición, en su departamento más reciente construyó la mejor herramienta para bajarle el ánimo a sus adorables compañeros de edificio: un dispositivo que emite pulsos electromagnéticos.
En pocas palabras, hizo realidad el sueño de muchos.
Este individuo —que se hace llamar Kevin en Patreon— es un entusiasta de la electrónica, porque lo que siempre ha tenido en su casa numerosos componentes y refacciones de toda clase de aparatos. Cuando se le acabó la paciencia con sus vecinos, un domingo a las 7 am, inmediatamente comenzó a buscar cada condensador eléctrico y bobina de su colección, para combinarlos con un transceptor Yaesu (una especie de walkie-talkie con más potencia).
El resultado fue un EMP portátil, con capacidad suficiente para freír bocinas a unos cuantos metros de distancia. Curiosamente eso era lo único que necesitaba, pues al apuntarlo hacia la pared de sus vecinos se dio cuenta que todo el ruido se acabó al instante, aunque tuvo más éxito del que esperaba, dado que también arruinó algunos teléfonos celulares.
Obviamente la hazaña no es tan sencilla de recrear, ya que Kevin es un experto en el manejo de componentes electrónicos. Hacer ese dispositivo sin suficientes conocimientos podría no ser tan sencillo, aunque en Quora y Wikihow hay muchos tutoriales relacionados con el tema. En todo caso necesitas paciencia y mucho tiempo libre.
Al final Kevin admite que la desesperación lo llevó a hacer algo indebido —en Estados Unidos, donde vive este hombre, es catalogado crimen federal—, así que poco después de que el blog Hack a Day publicó su anécdota, les escribió un correo a los editores para que la quitaran y así, borrar evidencia incriminatoria de su acto justiciero.
Pero es difícil culparlo por reaccionar de ese modo, en especial porque hay vecinos que siguen teniendo la misma actitud molesta aún cuando alguien ya trató de razonar con ellos.
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