Probablemente piensas que las arañas son criaturas solitarias, sentadas en sus redes esperando a que algo suceda. Si eres aracnofobico no estarás feliz de saber que hay una especie de araña que disfruta de la compañía de cientos de miles de arañas.
Estas arañas sociales, Anelosimus eximius, viven en colonias de más de 50,00 individuos en redes de hasta 7.6 metros de largo y 1.5 metros de ancho. Entre todas le dan mantenimiento a la telaraña, cazan y comen juntas. Puedes llegar a encontrar hasta 40 de estas masivas telarañas dentro de la selva amazónica de Perú, su país natal.
Cada metrópolis arácnida es dominada por hembras, los machos ocupan de 5% a 22% de la población total.
Es un reportaje para BBC Earth, el Dr. Jason G. Goldman, un experto en comportamiento animal, describe sus encuentros con estas arañas en sus aventuras a la selva amazónica Peruana.
“Un día me encontraba en la selva observando una colonia de arañas sociales, cuando de pronto una abeja quedó enredada en la telaraña” explica Goldman “En cuestión de segundos, docenas de predadores de 8 patas descendieron en masa hasta donde estaba la abeja. Era imposible observar lo que sucedía detrás de todas esas patas arácnidas, pero algo era seguro: esa abeja había llegado a su fin.”
Se cree que existen alrededor de 24 especies de arañas que se comportan como colonias de abejas. Pero a diferencia de las abejas o las hormigas que viven en una aristocracia, las arañas son igualitarias pues cualquiera de los integrantes de la colonia puede reproducirse y realizar cualquier trabajo.
“Son increíblemente bien organizadas” comenta Jonathan Pruitt de la Universidad de California. “La vocación de cada araña está íntimamente ligada a la eficacia que demuestran en dicha vocación. A falta de una diversidad genética, exhiben una diversidad acorde a sus personalidades.”
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