Los esfuerzos de Rovio para exprimirle hasta el último centavo a la fama de Angry Birds sonrojarían incluso a Nintendo. Y es que no es un secreto que la compañía finlandesa trató incontables fórmulas para incrementar la popularidad — de por sí exagerada— de sus emplumados personajes, desde puzzles más complejos con los puercos como protagonistas hasta ripoffs de Mario Kart. En fin, hay Angry Birds para casi todos los gustos. Pero el carisma del juego original no ha sido superado y, tal vez por eso, la secuela estaba provocando una tremenda expectativa.
Por suerte, no falló: Angry Birds 2 no sólo es la secuela que estabas esperando, es la que necesitas.
Queda claro que a Rovio ya no le preocupa tanto la compatibilidad; Angry Birds 2 luce espectacular
No hay demasiado que decir acerca de esta segunda parte, pues la mecánica permaneció casi intacta. Si acaso hay nuevos elementos heredados de Angry Birds Stella y Bad Piggies. Lo importante es que el juego tiene un feeling completamente renovado, comenzando con un toque de humor más divertido y, por otra parte, está el hecho de que los gráficos son dignos de la era HD. Todo luce caricaturesco, hay animaciones en cada rincón —hasta en el fondo— y la presentación en general es mucho más amigable. En ocasiones hasta parece que estás viendo los mini episodios de Angry Birds.
Obvio las microtransacciones siguen ahí —puedes descargar el juego gratis—, pero si dejas eso de lado, se trata de un juego mucho más divertido que el primer Angry Birds. Tal vez no sea suficiente para regresarle su vieja gloria a Rovio, pero sin duda será un éxito.
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