Los sensores biométricos son tendencia en los smartphones más nuevos. El más popular es el de huella dactilar y su principal objetivo es añadir una capa de seguridad al momento de desbloquear el teléfono o incluso para hacer pagos. Para la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos, este tipo de sensores y sistemas no son lo suficientemente seguros para proteger o identificar a un usuario, por tal razón está probando un nuevo sistema de seguridad llamado Mandrake.
Así las cosas, el nuevo sistema se encargará de analizar el movimiento de los dedos en las pantallas de los smartphones. Lockheed Martin, la empresa responsable de Mandrake, asegura que el sistema medirá factores biométricos, tales como velocidad, aceleración y presión que usa el usuario. El nuevo desarrollo se utilizará para añadir una capa de seguridad y para identificar sujetos sospechosos.
Aún no sabemos cómo es que Lockheed Martin implementará su sistema. Lo único bueno que veo del nuevo sistema es que eliminaría la opción de escribir passwords de varios caracteres para desbloquear el teléfono. ¿Será tan seguro como dicen?
Fuente: Nextgov
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