Según un reporte del periódico The Financial Times, la Comisión Europea investiga las operaciones de Apple en Irlanda, ya que sospecha que la empresa ha recibido apoyos fiscales ilegales a lo largo de los últimos 20 años. La información preliminar apunta a que Apple podría recibir una multa millonaria una vez que la comisión presente su resolución.
El problema es que las operaciones internacionales de Apple han estado basadas en Cork, Irlanda, desde 1980 y la compañía emplea a más de 4000 personas en ese país. Y aunque Irlanda cobra un impuesto empresarial de 12% —con lo que ha atraído a empresas como Amazon, Facebook, PayPal y Twitter—, los investigadores de la comisión aseguran que Apple paga menos de 2% por concepto de impuestos en este país.
Asimismo, los investigadores aseguran que Apple paga impuestos tan bajos debido a un ingenioso sistema de canalización de recursos, llevado a cabo por medio de empresas subsidiarias. Además, se piensa que la división internacional retiene 60% de las ganancias totales de Apple, para evitar ingresar el dinero a Estados Unidos, así como pagar impuestos en este país. Lo interesante es que, aun cuando la división Internacional Apple mantiene todo ese dinero en sus arcas, ha podido mantenerse como un residente no gravable en Irlanda. Por su parte, Tim Cook, director general de Apple, declaró que su compañía no recibe trato preferencial del gobierno irlandés.
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