Existe la creencia que la tecnología moderna y el arte tradicional no se llevan del todo bien, sin embargo, sobran ejemplos de la excelente relación entre ambos aspectos de la cultura. Pero más allá de la utilidad de Photoshop en todo lo que involucra diseño gráfico, Cirque du Soleil nos da un ejemplo imaginativo y artístico, al valerse de un puñado de cuadricópteros para crear una impresionante coreografía.
Welby Altidor, el director creativo de Cirque du Soleil, explica que en ocasiones su equipo experimenta con tecnologías emergentes para averiguar si hay forma de darle un nuevo significado en el escenario y “agregarle un poco de magia”. La célebre compañía de entretenimiento buscó la asesoría de Verity Studios AG para escribir complejos algoritmos que permitieran mover los drones de manera muy precisa y fluida hasta el punto de lograr que no se notara el patrón de vuelo de una máquina. “La intención es que se conviertan en actores genuinos, con el resto del reparto, para que la representación sea tan natural como siempre”.
Con el nombre de Sparked: A live interaction between human and quadrocopters, el cortometraje demuestra que con programación fina y minuciosa es posible darle identidad a un drone. “Con las herramientas necesarias, es fácil crear una personalidad para cada cuadricóptero, darles un toque de gracia y hasta hacerlos juguetones.”, añadió Altidor. En opinión de los expertos de Cirque du Soleil, hay mucho potencial en el uso de drones para las artes escénicas y apenas es el comienzo.
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