La costumbre dicta que para que una pantalla funcione de manera adecuada, debe tener un marco uniforme, ya sea de 4 lados o circular, pues de otro modo la emisión de luz se desequilibra al punto de generar una mala experiencia visual. No obstante, Sharp desarrolló un método para fabricar paneles con formas muy variadas, sin que se deteriore la calidad de la imagen ni el balance de iluminación.
Bajo el nombre de pantalla de forma libre, esta técnica permitirá que las compañías de integración, como los fabricantes de automóviles o los productores de soluciones tecnológicas para el hogar, desarrollen interfaces a la medida valiéndose de mayor libertad creativa. "Los paneles convencionales son rectangulares porque requieren de un ancho mínimo para el bisel, de modo que se puedan insertar los filamentos del circuito de control (conocido como portal de acceso) en el perímetro de la zona visual. Pero con nuestro método, esa función se dispersa desde abajo de los pixeles, en lugar de a través desde los costados del panel, lo que permite reducir considerablemente el grueso del bisel para que el LCD se adapte a la forma deseada.", detalla el comunicado de prensa de Sharp.
Una de las aplicaciones más obvias es que el tablero de las funciones digitales de un auto ya no tendrá que ser rectangular y tampoco hará falta que los controles se separen en módulos. Con la solución de Sharp todo estará integrado en una misma pantalla y se presentará sobre una estructura que se adaptará de manera orgánica a la estética del vehículo.
Sharp no reveló cuándo comenzaremos a ver este tipo de paneles de forma adaptable, pero dice que la tecnología ya está lista para producirse en masa, así que es cuestión de tiempo para que se integre en los productos de varias industrias. La interrogante que no resolvió la compañía es si su técnica también servirá para dispositivos pequeños, como relojes, pues dicha flexibilidad serviría para la creación de formatos muy creativos de tecnología portable.
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