En el marco de Build 2014, los desarrolladores vieron las primeras muestras de lo que probarán durante la conferencia. El primer gran cambio es que ahora desarrollarán aplicaciones que se podrán usar en las diferentes versiones de Windows 8.1, es decir, ya sea en una computadora, tablet o smartphone.
Lo interesante de este movimiento es que Microsoft abre aún más la capacidad de desarrollo para los programadores de apps. La idea es que una misma aplicación pueda ser usada en las 3 plataformas de Windows, que en realidad son 2: las aplicaciones nativas de Windows 8.1 y el entorno de Windows Phone 8.1.
La idea es que los desarrolladores comiencen a programar sus aplicaciones en Visual Studio y que puedan corregir errores, probar el aspecto, las funciones y el consumo de poder de procesamiento, todo para Windows Phone, Modern en Windows 8.1 y Modern en Windows RT. Asimismo, los desarrolladores escogerán entre darle exactamente el mismo diseño a todas sus aplicaciones o personalizar cada una de las ediciones.
Por otro lado, y tal vez más importante, al ser adquiridas, estas apps universales se podrán usar en todos los entornos, siempre y cuando el desarrollador haya decidido que será así. De hecho, los programadores pueden escoger cobrar por separado o el adoptar el modelo de "compra una vez para todas las plataformas".
Esta nueva característica será potencialmente benéfica para Microsoft, ya que muchas de las trabas que algunos desarrolladores encontraban para lanzar apps fueron retiradas.
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