Si tienes Facebook, o básicamente cualquier red social, ya viste el post de Charlie Challenge 30 veces en tu timeline. Desde un video de reacciones hasta burlas y memes del supuesto espíritu muevelápices han inundado Internet en los últimos días.
Para aquellos que se acaban de conectar a Internet después de 3 días de ausencia, Charlie Challenge es un juego en el que se ponen 2 lápices en forma de cruz encima de una hoja con opciones, como Si y No, tus prospectos de matrimonio, o lo que se te ocurra en el momento. Posteriormente hay que decir las palabras “Charlie, Charlie are you there?” Y el espíritu contestará… aunque me parece muy extraño que conteste “No”, si no está ahí… pero bueno. Al final del juego hay que preguntar “Charlie, Charlie can we stop?” y si el espíritu contesta que no, o simplemente no se le hace esta pregunta y se abandona el juego, pasarán cosas extrañas a tu alrededor. (Se desconoce si el espíritu es bilingüe).
De acuerdo con la leyenda, Charlie es un espíritu mexicano (que al parecer no le gusta que le digan Carlos o sus papás tenían afinidad por nombres anglosajones o algo) que ronda por todo el planeta contestando preguntas de adolescentes. El fantástico poder de ultratumba de Carlos es mover ligeramente artículos de oficina colocados con fragilidad uno sobre otro desde el más allá. Pero, ¿qué causa este increíble fenómeno?
La respuesta es simple: la misteriosa fuerza de la gravedad.
Para empezar, los lápices están colocados en una posición poco natural y el reducido soporte entre ellos causa que en un punto el lápiz con la menor superficie de contacto se mueva a una posición más natural, ya sea por la más sutil ráfaga de viento o por la gravedad misma. Es por esto que el fenómeno es tan constante y puede repetirse varias veces.
Para poner esto a prueba y eliminar toda superstición, simplemente coloca la cruz de lápices en una superficie plana en cualquier momento del día y no hagas ninguna pregunta; eventualmente el lápiz de arriba se moverá a una posición donde tenga más soporte sin importar si invocaste el espíritu de Hitler o si cantaste lo poco que recuerdas de Gangnam Style.
Ahora ya sabes cómo funciona esta nueva ouija de los pobres y podrás sorprender a tus amigos con este simple truco sin temer al implacable espíritu de Charlie the pencilmover Juarez.
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