La espera por el Apple Watch al fin terminó —en regiones selectas del mundo, ya que en Latinoamérica seguiremos a la expectativa—, lo que significa que mucha gente ya está empujando al límite las características del dispositivo y, desde luego, que comienza a descubrir cosas que no aparecen en reseñas ni en análisis de medios especializados.
Quisimos darle un poco de orden a todas esas opiniones y hacer esta recopilación —que iremos expandiendo con el pasar de las semanas—, para ayudarte a decidir si el Apple Watch es lo que necesitas, o si es mejor que te vayas por otro smartwatch.
Tiene un tamaño conveniente
La opinión de qué tan bien se ve un smartwatch en la muñeca varía con cada persona, pero el común acuerdo de usuarios y reseñadores es que las dimensiones del Apple Watch son adecuadas. Claro, no es casualidad, por eso Apple vende 2 variantes, cada una de diferente tamaño. En comparación con los relojes inteligentes más pequeños (Pebble Steel, Moto 360), el de Apple de 42mm es apenas un poco más grande; mientras tanto, el de 38mm es ideal para brazos delgados.
Según comentarios de la comunidad de 9to5Mac, el bisel y la pantalla (no importa si está encendida o apagada) tienen la misma tonalidad de negro, así que el reloj da la impresión de ser más grande.
¡Sí es contra agua!... al menos un poco
Después de mucha polémica y un poco de incertidumbre, finalmente se resolvió una de las interrogantes más grandes acerca del Apple Watch. Si bien Apple advierte que debes cuidar el smartwatch hasta de salpicaduras, los expertos de FoneFox usaron su Sport Edition para hacer pruebas de resistencia al agua. En todas, el Apple Watch aprobó con honores, incluyendo la de varios minutos sumergido en una alberca. Es casi seguro que el resultado de hacer lo mismo con otros ejemplares del reloj termine en desastre, pero dependerá más de qué tan maltratados estén la pantalla y el armazón, que de la resistencia nativa al agua. Claro, hacen falta más exámenes de supervivencia para verificar cuál es el límite del Apple Watch.
Es compatible con otros cargadores
El Apple Watch Sport tiene cargador de plástico, en lugar de uno de metal
Apple decidió ser un poco más flexible con las capacidades de recarga del Apple Watch, pues varias personas comprobaron que el dispositivo es compatible con el estándar Qi. Lo anterior quiere decir que puedes usar otras estaciones de recarga inductiva —como la del Moto 360— para reabastecer al reloj de Apple. Ahora bien, no todas las bases Qi funcionan con el Apple Watch, las más baratas parecen tener problemas para transmitir la intensidad de energía adecuada y, en consecuencia, la batería del smartwatch se queda igual. Un lector de Apple Insider se dio cuenta que la compatibilidad es bidireccional, pues el cargador del Apple Watch también sirve para otros dispositivos. Que por cierto, a cambio de tener una batería con capacidad limitada, el Apple Watch se recarga al 100% en menos de 1 hora.
Cuenta con un gran potencial para medir actividad física
Al inicio, fue una decepción que el Apple Watch no ofreciera tan buena asistencia para el acondicionamiento físico, en especial porque sus creadores habían prometido grandes cosas hace un año. Pero es posible que todo sea un malentendido, ya que los primeros vistazos al interior del dispositivo revelaron que sus sensores son sumamente avanzados. Por ejemplo, el monitor de ritmo cardiaco tienen la capacidad de medir los niveles de oxigeno en la sangre —a pesar de que Apple no había dicho nada al respecto—. Es probable que Apple tenga reservadas algunas características para actualizaciones futuras de software y que esté esperando para lanzarlas hasta que perfeccione el funcionamiento.
La personalización tiene gran relevancia
Para mucha gente —incluyéndonos— es ridículo que Apple haya lanzado tantas opciones de personalización para la correa, pero que no permita elegir más alternativas para el diseño del armazón. A pesar de la ironía, muchas personas están satisfechas y hasta dicen que es una ventaja, pues argumentan que "la estructura metálica del Apple Watch tiene una identidad universal, en tanto la personalidad del usuario proviene de la correa". El veredicto mayoritario acerca del Apple Watch es que el equilibrio del diseño trasciende de lo que dicen las apariencias. Por otra parte, las opiniones encontradas están en el costo de las correas; hay quienes consideran que deberían tener un precio más accesible, mientras que otros compradores justician lo que está cobrando Apple ante el hecho de que tienen un diseño original y cómodo de usar. Al final, ese choque de ideas terminará cuando los fabricantes de accesorios compatibles lancen sus propios modelos, pues el ecosistema promete ser colosal y saturado de creatividad, justo como sucede con las cubiertas protectoras de los teléfonos.
El funcionamiento puede ser lento... y con errores
Apple se ha caracterizado en últimos años por lanzar productos con mínimos errores de software, libres de defectos de diseño y cuyo concepto luce casi perfecto. El Apple Watch es una excepción, al menos en lo que refiere a funcionamiento. Aunque ya se había dicho que la versión wearable de iOS luce como una plataforma sin terminar, no hay justificación para tantos problemas: la comunicación entre el reloj y el iPhone suele ser lenta, hay muchas aplicaciones que tardan en responder, la pantalla no siempre responde con rapidez a ciertos gestos —y a veces no se enciende de manera automática cuando acercas el reloj al rostro—, Siri comete errores que no existen en el iPhone, la interfaz tiene bugs visuales, a los sensores les falta precisión, etcétera. Si tomamos en cuenta el historial de Apple en cuanto a la resolución de problemas, es casi seguro que pasará poco tiempo para que dé respuesta a cada defecto —siempre y cuando sea cuestión de software—, así que no hay tantas razones para preocuparse.
La configuración es muy laboriosa
El problema de que el Apple Watch esté tan ligado al iPhone no es sólo que necesitas llevar siempre ambos dispositivos, sino que la configuración inicial del reloj puede ser demasiado tardada. Desde el momento que haces la sincronización inicial, todas las aplicaciones compatibles que tienes en tu teléfono se instalan en el smartwatch, por lo que podrías terminar con más apps de las que quieres —o que necesitas—. Obviamente entre menos tengas instalado, más sencilla es la navegación en el menú. Otra cosa: para evitar que el Apple Watch se convierta en una pesadilla de notificaciones, es recomendable que dejes activas únicamente las más esenciales y urgentes, pues el resto seguirán disponibles en tu teléfono. Además, si tienes demasiadas alertas activas, la vibración del sistema táptico puede ser realmente molesta —a pesar de que está diseñada para ser muy sutil—.
Usarlo es una maravilla y a la vez, una pesadilla
Aunque hay muchísimo que decir acerca del funcionamiento del Apple Watch en condiciones cotidianas y diversas, lo principal es que los desarrolladores tienen un concepto deficiente —o hasta retrograda— de cómo debe comportarse un smartwatch. Y en específico, no entienden las posibilidades del de Apple. La app de Twitter, por ejemplo, muestra el timeline y los trending topics de manera simple, pero insípida; no hay forma de ver los replies de tus tweets y ni que decir de las conversaciones: seguirlas termina siendo muy confuso. Es decir, Apple no es tan culpable por las cosas malas en la experiencia que ofrece su smartwatch. Fuera de las defectos y complicaciones, usar el Apple Watch es una maravilla, al menos en palabras de numerosos fans en CNet quienes dicen haber probado otros smartwatches "muy comunes y aburridos".
La clave para disfrutar el Apple Watch, según estas voces, radica en lo sofisticado de las interacciones; toma tiempo acostumbrarse al Force Touch, pero una vez que tus dedos se adaptan, "puedes entender que es el futuro para las pantallas táctiles" gracias a que detecta con extrema precisión la intensidad de cada toque. Queda claro que una vez que los desarrolladores saquen provecho a esa característica, la experiencia será mucho más envolvente, del mismo modo que cuando clic derecho revolucionó el uso del entonces mouse de un solo botón.
Por otro lado, a menos que te encuentres en un lugar con poco ruido, se trata de un dispositivo que necesitas usar con las 2 manos, porque demanda control desde la pantalla y de la corona lateral. Existe la opción de manejar todo por medio de comandos de voz, pero al igual que con Android Wear, el ruido del ambiente distorsiona tanto tus órdenes que Siri no entiende casi nada —aún más que con el iPhone—. Por fortuna, importa en cuál brazo uses el Apple Watch, dado que la modalidad para zurdos funciona perfecto.
La recomendación final es que si tienes interés en comprar el Apple Watch, esperes hasta que todos los problemas sean resueltos. Después de todo, ya es costumbre que la primera generación de un producto llega con numerosas imperfecciones —le sucedió hasta al iPad y al iPhone—.
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