El iPhone 6 prometía revolucionar el concepto de smartphone, pero al final sólo fue otro paso de sofisticación, idéntico a los que se dieron con generaciones previas. Claro, no es un aspecto negativo, pues si algo caracteriza a Apple es que perfecciona las características que ofrecen sus competidores, para hacerlas más útiles y sencillas de usar. De hecho, aunque a simple vista se nota que la propuesta del iPhone 6 es poco innovadora —hasta podría parecer que la compañía se conformó con ponerse al día frente a sus rivales—, la realidad es que este par de smartphones fueron creados para expandir las posibilidades del iPhone y para ello, presentan interesantes novedades. La clave de un producto fresco y exitoso, justo como demostró Apple una vez más, está en el planteamiento de esas características.
El diseño cambió
Es costumbre que con cada generación del iPhone, Apple presente algunos cambios estéticos. Curiosamente, la renovación reciente es más un tributo del iPhone original, que un paso hacia algo completamente nuevo, pues en lugar de seguir con la estructura angular que tanto caracterizó al iPhone 4, Apple volvió a los bordes redondeados. La ventaja de esa decisión es que el diseño provoca una sensación muy sofisticada en las manos, debido a que el cristal que protege a la pantalla se curvea hacia las orillas hasta conectar con el armazón, dejando fuera hendiduras o relieves. La idea es que el iPhone 6 parezca estar hecho de una sola pieza.
Si bien todas las ediciones del iPhone tienden a estar fabricadas con materiales resistentes y de muy alta calidad, Apple presume que la selección de metales con los que construyó el iPhone 6 sentarán un nuevo precedente en la industria. Y es que se trata de una combinación de aluminio anodizado y acero inoxidable, mientras que el cristal fue sometido a un proceso de ionización para incrementar su resistencia. En pocas palabras, la durabilidad está garantizada. De primera impresión, los nuevos iPhone tienen una apariencia premium que es equiparable sólo con el One (M8) de HTC. Hay detalles que seguramente causarán opiniones encontradas, como las bandas que decoran la tapa trasera o el hecho de que la cámara sobresale demasiado del chasis, pero al menos el cambio de dirección visual resulta muy fresco.
El iPhone 6 tiene un espesor de 6.9 milímetros y el iPhone 6 Plus, de 7.1 milímetros
Otra cosa es que el botón de inicio ahora está ubicado en el costado derecho, según Apple, para que sea más fácil alcanzarlo cuando se sostiene el teléfono con una sola mano. Hablando de conveniencia de uso, los representantes de la compañía dicen que compensaron el incremento de tamaño con una nueva función del botón de inicio, la cual consta de tocarlo suavemente 2 veces para que la interfaz completa se recorra hacia la mitad inferior de la pantalla y que con eso, el pulgar llegue a cualquier elemento sin inconvenientes.
Hay 2 tamaños y 2 pantallas
Ante tantos rumores y el precedente del iPhone 5c, estaba casi confirmado que el iPhone 6 llegaría en 2 versiones de distinto tamaño. Obviamente, al escalar las dimensiones era necesario incrementar la resolución de la pantalla. Así que mientras la edición de 4.7" despliega 1334 × 750 pixeles, la de 5.5" muestra 1920 × 1080 pixeles. Apple dice que no sólo se trata de aumentar los puntos por pulgadas, sino también de mejorar la nitidez y el nivel de brillo. Para lograrlo, la empresa creó un método llamado Retina HD, el cual ofrece una profundidad de contraste 1400:1 y 500 cd/m2 de brillo. En teoría, esta nueva pantalla mostrará colores muy intensos incluso bajo plena luz del sol. Lo importante es que Apple al fin respondió a las peticiones de su audiencia de ampliar su catálogo de teléfonos.
Es más poderoso
No había duda de que el iPhone 6 tendría más capacidad de procesamiento, pero lo interesante radica en los detalles. El procesador A8 mantiene la arquitectura de 64 bits, es 50% más poderoso que el A7 y agrega eficiencia energética que, obviamente, significa una batería de mayor duración. Además, la pila de ambos modelos es más grande que la contenida en el iPhone 5s. Y en lugar de limitarse a ofrecer núcleos adicionales o escalar el RAM, Apple puso énfasis en los sensores. El procesador M8 es capaz de registrar e interpretar con detalle todos los datos provenientes del acelerómetro, el giroscopio y el barómetro, incluso distingue entre correr, trotar, caminar, usar la bicicleta y otras actividades físicas; también mide con mucha precisión la elevación del usuario, ya sea que esté desplazándose en un elevador, en una escalinata fija o en escaleras eléctricas.
Tiene una cámara mejorada
A pesar de que cada iPhone suele tener una cámara que está por debajo del promedio en lo que respecta a megapixeles, las imágenes que generan siempre son nítidas y tienen buena calidad, superando con frecuencia al resto de los teléfonos de gama alta. Desde luego, hay excepciones, como el Lumia 1020 que apuesta por un sensor de gran tamaño y una lente Zeiss. Considerando que la moda de los camarófonos sigue creciendo, Apple aprovechó el incremento de espacio del iPhone 6 para instalar componentes fotográficos mejorados y con ello, propiciar resultados aún más satisfactorios. En lugar de escalar las dimensiones del fotograma, la compañía perfeccionó su sensor iSight y la óptica, para capturar más luz y,
en el caso del iPhone 6 Plus, brindar estabilización óptica.
Pero no sólo eso, el iPhone 6 imita el sistema de detección por fases de las cámaras DSLR para que el enfoque automático responda con el doble de velocidad que en el iPhone 5s y con mucha más precisión. En el mismo tema de rapidez de respuesta, las tomas con filtro HDR ahora se generan de manera instantánea, al presionar una vez el botón de disparo, en lugar de que deba dejarse presionado durante varios segundos. Otro detalle interesante es que los nuevos iPhone pueden grabar en resolución 1080p a 60 cuadros por segundo, así como video en cámara lenta a 240 cuadros por segundo.
Funciona con iOS 8
Hay quienes dicen que a pesar de las novedades que presentó iOS 7, el sistema operativo móvil de Apple es casi obsoleto. Tal vez es cierto y aún falta mucho camino por recorrer para igualar la capacidad de Android o simplemente Apple quiere tomar un rumbo diferente, pero al final, no importa, lo interesante es que iOS 8 llegará con el iPhone 6 para corregir algunos errores, compensar carencias e introducir numerosas características nuevas. Por ejemplo, ofrece notificaciones interactivas, permite que los juegos tengan un mejor desempeño gráfico, extiende la compatibilidad con el Apple Watch, agrega un teclado predictivo y cuenta con una app —de nombre HealthKit— que lleva registro detallado de toda la actividad física del usuario.
Permite hacer pagos electrónicos
Al igual que muchas compañías de vanguardia tecnológica, Apple prometió desde hace tiempo que eliminaría el uso de efectivo e incluso de tarjetas de crédito, por medio de un novedoso sistema de pagos electrónicos. Sobra decir que esa presunción aún no se hace realidad y que ni Google, con su iniciativa Wallet, ha logrado muchos avances al respecto. De hecho, el nivel de adopción de Passbook a la fecha es muy bajo. Sin embargo, con la combinación del iPhone 6 y el iWatch, Apple espera cumplir al fin su promesa de convertir a los teléfonos y los relojes inteligentes en la opción definitiva para pagar en línea o en establecimientos físicos. Bajo el nombre de Apple Pay, la estrategia funciona por medio de NFC y autentifica las compras con el lector de huellas Touch ID, validando cada transacción con un número único.
Este método no almacenará información crediticia en el teléfono y será compatible con American Express, MasterCard y Visa, así como otras asociaciones bancarias a escala global. Al inicio, 22,000 tiendas trabajarán con el sistema de pago de Apple, incluyendo Subway, Disney Store, McDonalds y Nike Store, y se irán agregando muchas más en fechas próximas, tanto en Estados Unidos como en el resto del mundo.
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